USO

El uso de HMVA está siendo extendido sobre todo a especies de huerta y algunas especies leñosas como la vid y el olivo. Aunque realizan simbiosis con la mayoría de las plantas vasculares, las familias Amaranthaceae, Cruciferae, Chenopodiaceae, en general no son susceptibles a la micorrización.

Como se ha comentado anteriormente también están siendo utilizados para trabajos de reforestación y recuperación de ecosistemas y para reducir la contaminación en suelos con alto contenido en metales pesados.

 

APLICACIÓN

La aplicación de HMVA debe hacerse preferentemente en semillero, añadiendo al sustrato lo equivalente a una cucharada de café (5g). Esto hará que la micorriza se forme desde el inicio del desarrollo de la planta, lo que hace más eficaz su aplicación.

También puede añadirse esporas al lecho de plantación o mezclarse con el horizonte superficial antes de realizar la plantación. En cualquier caso el contacto desde la germinación aumenta ampliamente las posibilidades de éxito de la inoculación.

Asi mismo, estudios en vivero para multiplicación de frutales por estaquillado o plantón, resultaron en una disminución en el tiempo de brotación.

 

Esporas de endomicorrizas en campo

MANEJO DEL SUELO

Una vez inoculado es necesario realizar un mínimo laboreo y evitar el uso sobre todo de fungicidas, incluyendo el Cobre, ya que son incompatibles con el desarrollo de micorrizas. El estado nutricional del suelo nos va a orientar sobre el éxito de la incoculación, ya que la micorrización carece de sentido en suelos ricos en nutrientes. El contenido en P del suelo, también es un limitante en el uso de HMVA, ya que los cultivos en suelos ricos en P no van a necesitar de la micorrización o sus beneficios van a verse disminuidos.

En resumen, la inoculación con HMVA, ya sea en vivero o en campo, ha demostrado ser una herramienta eficaz para aumentar la producción, reduciendo costes en fertilización y por tanto reduciendo el impacto de las labores agrícolas. El uso de HMVA no está restringido a especies hortícolas sino que también puede aplicarse en frutales y como herramienta para reforestación y conservación de espacios naturales. Los HMVA son obligados compañeros en el camino hacia una agricultura sostenible.